La preocupación por la calidad del aire en las grandes ciudades tiene en el denso tráfico una de sus principales asignaturas pendientes. Se trata de un fenómeno que causa un doble efecto negativo sobre la salud de conductores y vecinos.

Por un lado, la contaminación aumenta de manera considerable en las horas con mayores congestiones, dado que buena parte de los vehículos españoles presenta una antigüedad considerable. Por otro, los nervios de más de un conductor se ponen a prueba a diario en los numerosos atascos que se forman en las principales arterias de Madrid, por ejemplo.

Precisamente, la capital española ha vuelto a modificar su normativa de circulación con vistas al otoño, la época del año en la que más visibles resultan los efectos del tráfico. La gran novedad es que los coches más antiguos tendrán completamente vetada la circulación durante los episodios de alta contaminación.

Recordemos que el protocolo aprobado en 2016 establecía una serie de niveles de restricción del tráfico en función de diferentes indicadores contaminantes. Una vez más, se hace patente el interés de apostar por fórmulas sostenibles, como el coche eléctrico BMW i3.

Para ser exactos, esta modificación implicará que todos los vehículos que no dispongan de un distintivo medioambiental no podrán circular mientras permanezcan activados los niveles 3 o 4 del protocolo.

La medida profundiza en la limitación de la circulación prevista hasta la fecha, que se limitaba a vetar el uso de los vehículos en función del número de su matrícula (par o impar).

Cabe destacar que el Ayuntamiento de Madrid espera que el volumen de tráfico se reduzca un 17,7% (según datos de la DGT) pero la emisión de gases contaminantes debería caer un 33,2%. Semejante disparidad se explica por el hecho de que los coches con más años son también los más contaminantes.

En BMW apostamos por el cambio hacia la movilidad sostenible

Desde luego, los picos de contaminación nos recuerdan la importancia de acelerar el proceso de renovación del parque automovilístico español.

La gama BMW híbrido enchufable y BMW eléctrico da respuesta a cualquier necesidad de movilidad urbana sin comprometer el medioambiente. Lógicamente, cualquier BMW eléctrico goza de plena libertad de movimientos sea cual sea el nivel que esté activado en ese momento. Más allá de las medidas de choque, es responsabilidad de los conductores abrazar cuanto antes un modelo automovilístico más limpio y sostenible.

Las anteriores restricciones no serán, en cualquier caso, las últimas que se aprueben a este respecto. El Plan de Calidad del Aire de Madrid dibuja un horizonte muy ambicioso en cuanto a la renovación de la flota de coches que circulan a diario por la mayor ciudad de España.

Así, todos los vehículos fabricados con anterioridad al año 2000 tendrán prohibida la circulación en Madrid a partir de 2025. Previamente, estos coches tampoco podrán estacionar en la ciudad (a partir de 2020). Con todo, la limitación es más severa con los vehículos diésel, en cuyo caso la prohibición se
aplicará a todos los modelos matriculados antes del año 2006.

Eso sí, los distintivos de calidad medioambiental que asigna la DGT no obedecen a la fecha de fabricación del vehículo, sino a sus características técnicas.

Existen diferentes niveles de sostenibilidad, destacando la categoría ECO, compuesta íntegramente por modelos como el BMW híbrido enchufable. Los conductores que den el salto a este tipo de vehículos seguirán disfrutando de plena libertad de movimientos en cualquier nivel de contaminación y con estacionamiento gratuito en plazas de pago.